Hdad. Penitencial de Ntro. Padre Jesús Atado a la Columna

La Hermandad, nacida en el seno de una asociación religiosa de marcado carácter mariano como eran las Congregaciones Marianas, ha tenido desde siempre una gran devoción mariana, en especial con la Inmaculada Concepción, copatrona  de la Hermandad.

Prueba de ello es la celebración anual de una novena en el mes de Diciembre que culmina el día 8, fiesta de la Inmaculada Concepción. Otras pruebas de ello son, por ejemplo, nuestros colores característicos, blanco y azul purísima, o, la imagen que llevamos en la parte posterior de nuestra medalla.

La novena, junto con los dos triduos que realizamos en los meses previos a la Semana de Pasión, es uno de los actos más importantes de nuestra Hermandad.

Aquí reproducimos un texto utilizado en una novena de años anteriores:

                          

                                                CONSAGRACIÓN A NUESTRA MADRE INMACULADA

 

Madre Inmaculada acepta esta Consagración al finalizar hoy tu novena. María se nuestra Madre, se nuestra Guía.

Queremos ofrecerte nuestras vidas, nuestros proyectos, nuestras ilusiones, nuestros mejores deseos de ser dignos hijos de Dios Padre, como Tú lo fuiste y lo serás siempre, eternamente.

Queremos ofrecerte, nuestra firme decisión de ser fieles discípulos de tu Hijo Jesucristo.

Queremos ofrecerte el anhelo de vivir cada día la docilidad al Espíritu Santo, para que nos ayude a ir abriendo los surcos de la vida, de nuestras vidas, según la voluntad de Dios, Padre Todopoderoso.

Nos consagramos a Ti, Madre Inmaculada, Tú serás nuestra Guía sabiendo que nunca nos vas a abandonar y que siempre vas a velar por nosotros y por nuestras cosas.

Cada uno en particular te decimos: SOY TODO TUYO, MADRE Y GUÍA NUESTRA, CUANTO TENGO TUYO ES.

AMÉN.